Octubre 11

Pocas veces sentí un dolor tan grande como el que ahora en mi pesa, hice méritos para llegar hasta aquí, buenos o malos, trazaron el rumbo de lo que hoy vivimos.

No es una carta más con recuerdos de amor,  es expresarte que he sido condenado por la culpa que hoy recae en mí, y no tengo  razón para decirte lo siento. 

Nunca tuve miedo de perder a alguien, como lo he tenido ahora, no imagino despertar cada mañana y superar el pensar en ti sin poder darte los buenos días, y lo mismo al anochecer, eres lo que jamás quiero perder en la vida y me rehúso a siquiera pensarlo, he cometido errores imperdonables lo sé, y no espero que hoy me perdones, pero sí que me permitas demostrar tu valor en mi vida.

Jessi, mi bonita...